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Qué hacer en caso de siniestro

Los profesionales del sector de la construcción asumen una alta responsabilidad en su trabajo del día a día. Durante el desarrollo y ejecución de un proyecto existe un gran número de condicionantes e imprevistos que pueden afectar a su normal desarrollo. Por eso, ante cualquier percance que pueda ocurrir, el profesional tiene que estar, por un lado, bien protegido a través de un seguro y, por otro, bien informado de cómo proceder en caso de siniestro.



Ante esta situación, el papel de la compañía aseguradora es fundamental. Por ello es importante contar con una buena póliza que nos garantice la total protección. En los seguros de construcción, como, por ejemplo, el seguro de RC para profesionales de Arquitectos Técnicos de Musaat, la finalidad es atender las reclamaciones, que se les puedan formular a los asegurados, derivadas de su actuación profesional. El contrato hace referencia a reclamaciones y no a obras, por lo que la póliza debe estar en vigor a la recepción de la reclamación para que el contrato sea operativo y obligue a ambas partes.

Por ello, es importante saber reconocer qué es exactamente un siniestro. Se trata de cualquier reclamación que por escrito (carta, correo electrónico o procedimiento judicial) se le formule al asegurado por su actuación profesional durante la vigencia de la póliza. La reclamación la deberá efectuar un tercero perjudicado que entienda lesionado su derecho. En caso de que se comunique un hecho dañoso sin reclamación formal, esta se registra como comunicación preventiva y no como siniestro.

¿Cómo proceder ante un siniestro?

En Musaat respondemos a las necesidades de nuestros mutualistas en un momento tan crítico y delicado como es un siniestro, poniendo, a su disposición todos los medios a su alcance y respondiendo en todo momento a nuestro compromiso de transparencia e información.

Si el mutualista recibe una reclamación derivada de su actuación profesional, bien sea por daños materiales o personales, probablemente tendrá un siniestro.

1) Comunicarlo a la compañía aseguradora, en este caso a Musaat, directamente o a través del mediador, mediante un formulario de declaración de siniestro (recoge los datos necesarios para poder estudiar la reclamación y la actuación del asegurado, la cobertura, la posible causa de los daños y determinar la gestión en cada caso) en un plazo no superior a 7 días, una vez conocida la reclamación. Aunque es recomendable reducir estos plazos a 5 días hábiles si se trata de Juicios Ordinarios y a 24 horas si son Juicios Verbales y Actos de Conciliación. En las reclamaciones de índole penal, el plazo recomendable serán 5 días hábiles, salvo para diligencias que requieran un plazo menor.

En Musaat, ponemos el formulario de declaración de siniestro a disposición de nuestros mutualistas a través de nuestra página web.

Una vez recibida la comunicación del siniestro, la compañía aseguradora estudiará la reclamación y decidirá la actuación más conveniente en cada caso, e iniciará la gestión para la defensa de los intereses del asegurado, incluido en la mayoría de los casos el nombramiento de un perito y de un letrado colaborador.

2) Una vez notificado el siniestro a la aseguradora, el interesado deberá dirigirse al:

2.1. Letrado colaborador en zona designado y, para determinadas gestiones, al departamento de siniestros de Musaat, si se trata de un siniestro judicial.

2.2. Departamento de Siniestros, y en su caso, al letrado en zona designado por la Mutua, si se trata de un siniestro extrajudicial. Para determinadas gestiones, y en caso de que haya existido nombramiento de perito, se solicitará al mutualista que contacte directamente con el técnico designado.

3) Posteriormente, hay que recopilar diferentes tipos de documentos que ayuden tanto a la gestión como a la tramitación del siniestro:

Documentación que hay que presentar para la gestión de un siniestro:

o El formulario de declaración de siniestro con todos los datos posibles cumplimentados.
o La hoja de encargo.
o El CFO (Certificado Final de Obra), si lo hubiera.
o La reclamación, judicial o extrajudicial, y toda la documentación adjunta a la misma.
o El informe sobre los hechos redactado por el propio mutualista.

Documentación útil para la tramitación del siniestro:

o Libro de órdenes, si lo hubiera.
o Libro de incidencias. Informes de otras partes a los que haya podido acceder el mutualista.
o Cualquier información que pueda obrar en poder del mutualista relacionada con la propia reclamación.
o Información sobre la situación de solvencia del resto de los reclamados.
o Documentación que pueda acreditar aspectos sobre la ejecución de obra que pudiera ayudar a defender la no responsabilidad del mutualista en los daños reclamados.

Es importante que el asegurado facilite siempre toda la información disponible en relación con la reclamación recibida. Desde la comunicación inicial del siniestro hasta su cierre, deberá colaborar con el envío de la información que pueda recibir en relación con el siniestro, citaciones, etc. y, atender a las solicitudes que la compañía aseguradora le pueda plantear para una óptima resolución del siniestro.

Por su parte, la compañía aseguradora, en este caso Musaat, gestionará el siniestro, otorgando la defensa jurídica y el pago, en su caso, de las cantidades a las que el mutualista resulte civilmente responsable, siempre en los límites de las condiciones firmadas por el asegurado y la Mutua.